Dando continuidad en este último fin de semana del 26 al 28 de enero 2018. en estas dos localidades cercanas a su capital Valladolid. el flamenco despide el mes de enero, con dos eventos flamencos alternativos. Uno en la localidad de Zaratán, con la presentación del ballet español "Carmen Amaya", mas apto para un público general que aficionado al flamenco, debido a que predomina la coreografía de baile español sobre el flamenco y, estos se desarrollan sobre temas musicales grabados, sin participación directa de músicos y cantaores, aunque bien puede tener algo de positivo, por su atractivo en la variedad de los temas y su cercanía a un público menos exigente, en cuanto al flamenco me refiero.
Una instantánea de uno de los pasajes del ballet.
Encontrándonos en la localidad de Cigales, famosa por su buen vino clarete. El teatro local "las Peñuelas", presentaba un atractivo recital, que había levantado expectación entre la afición de estas tierras, por lo peculiar y la fama que conlleva la participación de la escuela jerezana en cuanto al compás y ritmo de sus famosas bulerías, al tiempo de ser un cartel completo y novedoso, cante, baile, guitarra y participación de un instrumento como es la dulzaina en la música flamenca. A sí lo mostraba el cartel del elenco de artistas.
El espectáculo dio comienzo con la aparición en escena del guitarrista Miguel Uña acompañando a la cantaora Silvia Verdugo, comenzando por unos tientos tangos, pasando a cantar por soleá dando escena a la bailaora, Ana Soto, que en todo momento dejo patente su calidad y maestría en el baile de la solea, bien cantada y acompañada por la guitarra y la percusión. Para ello dejo esta breve grabación de una parte de la solea.
El baile de Ana Soto por solea.
Al primer baile de Ana Soto, siguieron unas guajiras marcheneras interpretadas por la cantaora Silvia Verdugo.
La intervención del músico Samuel Brogueras con la dulzaina, quien antes de comenzar explico al público con acierto, la procedencia de este instrumento, al que se identifica generalmente como instrumento del folclore castellano ideal para jotas, viniendo a dejar claro que es un instrumento árabe de la cultura del Alándalus, anterior a la reconquista de España. Una vez aclarado este concepto comenzo interpretando primero unos tangos y una solea, acompañado por la guitarra de Miguel Uña. En esta parte debo insistir la buena conjunción y complementación que ejercieron dulzainero y guitarrista, sobre todo resaltar la solea, lenta, pausada en una continua pregunta y respuesta apareciendo a veces un sonido ronco simulando como si fuera la voz de un cantaor, en una perfecta melisma musical sin el sonido agudo de la dulzaina para finalizar con una ejecución de melodía final propia de la solea pero con el sonido y juego de las llaves de la dulzaina. Muy aplaudida la intervención de este músico, con patente perplejidad y extrañeza del público.
Tangos con dulzaina por Samule Brogueras.
Continuo el recital con unas alegrías para baile cantadas por Silvia Verdugo y bailadas con gracia y soltura no exentas de buen zapateado en las escobillas, donde Ana Soto, demostró sus cualidades técnicas, con desplantes airosos. muy aplaudida por el público en sus dos intervenciones.
Alegrias para baile
Después de estas intervenciones, se dio, como dijo la presentadora Silvia Verdugo, paso al plato fuerte de la noche con la aparición en escena del jerezano Juanillorro, acompañado a la guitarra por Alberto Franco, interpretando, tientos, solea, bulerias y una serie de fandangos personales, finalizando su intervención, invitando al resto de compañeros a la escena, para finalmente despedirse con un breve bis por bulerias.
Juanillorro de Jerez por Fandangos
Una buena noche de buen flamenco, donde destacaría el baile de Ana Soto, la progresión en el cante de Silvia Verdugo, la intervención y colaboración de la zulzaina a cargo de Samuel Brogueras, el buen compás y ritmo de las palmas y el buen toque de los guitarristas.
En síntesis, y en mi opinión respetando siempre cualquier otra, una velada flamenca muy completa, quizás falta de una mejor iluminación en el conjunto de la coreografía, hubo momentos,como la solea para baile en la primera intervención de la bailaora, Ana Soto, de completa oscuridad.
Como dato negativo y, esto lo vengo exponiendo en algunas de mis reseñas, la falta de asistencia pública, con un precio muy asequible, 5 € un elenco de buenos artistas, sigo sin entender como es posible que solo hubiera escasamente, la mitad del aforo, no solo en esta sala, y en esta noche, también a ocurrido en los anteriores recitales flamencos reseñados. Creo que comienza a ser preocupante para el futuro próximo del flamenco.(no quiero ser pesimista) pero los resultados están presentes.
Solo me queda para finalizar esta breve reseña, felicitar desde este medio a los artistas por la entrega y el arte desplegado. Felicidades.
Totalmente de acuerdo con tus comentarios. Solo un detalle yo encontré el teatro medio lleno, siendo en Cigales, un domingo por la tarde y con el fresquito que hace por estas tierras. De todas formas los que no fueron, se lo perdieron.
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